Alejandro Fernandez pide prisión para los responsables
Ejecutivos de la ex casa disquera de El Potrillo podrían ir a la cárcel de ser hallados culpables por la edición ilegal de dos discos
Aunque su objetivo no es económico y sólo pide que se deje de utilizar su nombre y explotar su trabajo, la demanda interpuesta por Alejandro Fernández contra la disquera Sony Music podría hacer que, de ser encontrados culpables, los responsables de la edición del disco De noche: Clásicos a mi manera y Diferente fueran sentenciados con seis meses y hasta diez años de cárcel.
De acuerdo con los artículos 424, 424 bis y 425 del código penal federal “se impondrá prisión de seis meses a seis años y de trescientos a tres mil días multa: al editor, productor o grabador que a sabiendas produzca más números de ejemplares de una obra protegida por la Ley Federal del Derecho de Autor, que los autorizados por el titular de los derechos”.
Fuentes cercanas a la defensa de Fernández explicaron por qué, a pesar de que la disquera aseguró en un comunicado que cuenta con la autorización para editar los temas que forman parte de Diferente, esto no es así.
“Las canciones son sobrantes de otros discos, se grabaron con ellos, la grabación le pertenece a Sony, pero el derecho de autor le pertenece a Alejandro, es muy diferente.
“No tienen derecho de explotación o comercialización. Además, la interpretación le pertenece a Alejandro, quien también tiene el derecho sobre su nombre que está registrado en derecho de autor.”
Sony Music anunció que mañana lanzaría el álbum con temas rancheros titulado Diferente, a pesar de que el cantante terminó su relación laboral hace meses cumpliendo con la grabación y promoción de siete discos.
“Si el martes (mañana) Sony saca el material, su situación legal va a empeorar de manera dramática en materia penal. ¿Cómo van a tener la autorización si estamos hablando de un contrato por siete discos firmados en 1998.
“A lo largo de esos años incluso salieron otros, como México Madrid y Alejandro Fernández - Bellas Artes, para los que se firmaron contratos adicionales, especiales, para que no se sumaran a los siete”, dijo la fuente.
Además del uso ilegal de los derechos de autor sobre las canciones, el equipo de Alejandro Fernández aseguró que Sony Music cae en un delito al utilizar su nombre y su sello.
“Aparentemente en la portada vienen unas mancuernillas o botones que dicen AF, eso está registrado también como marca, es decir, tampoco tienen derecho, por eso no ponen su rostro en la portada.”
Según estas fuentes, la disquera fue notificada a través de un notario de la demanda mucho antes del cateo a sus oficinas la semana pasada, haciendo caso omiso del mismo.
“Sí se les notificó con notario para que se abstuvieran de seguir en esa conducta, no hicieron caso, entonces se convirtió en un asunto penal. Ellos dicen que van a ver qué dicen los tribunales cuando esto ya es un caso ante un ministerio público federal”, concluyó.
La grabación le pertenece a Sony, pero el derecho de autor le pertenece a Alejandro, es muy diferente.”